Sí, los vinilos decorativos se pueden combinar perfectamente con otros elementos visuales en el escaparate, lo que permite crear composiciones mucho más atractivas y efectivas durante las campañas de rebajas. Por ejemplo, es común integrarlos con maniquíes temáticos, cajas de luz, estructuras en 3D, mobiliario decorativo o incluso iluminación focalizada para destacar zonas específicas del cristal. También pueden funcionar en conjunto con cartelería impresa, pantallas digitales o materiales textiles, siempre y cuando se mantenga una armonía visual que refuerce el mensaje sin sobrecargar el entorno. Una técnica muy utilizada es colocar el vinilo en los bordes del escaparate, dejando el centro libre para destacar productos reales en promoción. Asimismo, se puede jugar con capas, usando vinilos en el exterior del cristal y decoraciones internas que se vean a través de ellos. Esta combinación estratégica no solo potencia el impacto visual, sino que mejora la experiencia del cliente desde el primer contacto con el escaparate, atrayéndolo hacia la compra.